Es que este país me preocupa cada vez más (ver aquí).
Hace mucho que me dejé de creer las previsiones del Gobierno (bueno y de los organismos internacionales en general). Ahora el nuevo mantra es decir que no acabaremos como Grecia, ya veremos.
Hace mucho que me dejé de creer las previsiones del Gobierno (bueno y de los organismos internacionales en general). Ahora el nuevo mantra es decir que no acabaremos como Grecia, ya veremos.
Y mientras, siguen a vueltas con la reforma laboral. No creo que abaratar el despido y eliminar derechos nos vaya a sacar de esta crisis. Me parece que el (gran) empresariado de este país se comporta de forma farisea al afirmar que el mercado laboral es muy rígido y que lo único que pretende es acabar con la dualidad del sistema, que hace que los fijos estén muy protegidos frente a los temporales. ¿Es que ahora se han vuelto Robin Hood, defendiendo los intereses de los pobres currantes?
Cuando se creaba empleo a mansalva gracias al boom inmobiliario, no vi a ningún empresario quejándose de supuestas rigideces ni de injusticias sociales. Tampoco la rigidez pareció afectarles cuando de despedir masivamente se ha tratado.
Lo peor es que al final ha ido calando esta idea de que la solución a la crisis pasa por la reforma laboral. A mí no me preocupa la reforma, sino que con ella vengan los recortes.
En fin...
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